

Plato de Pollo y Cerdo compuesto por un kilo de comida 100% real.
Un solo platito no es una dieta equilibrada, ¡consulta nuestros menús para ofrecer una dieta variada a tu peludo!
Escoge el tamaño de tu menú según el resultado de la Calculadora Guau.
Paquetes envasados al vacío en formato de 1kg. (Formato de 0.5 kg solo en pedidos de menos de 15 kg del mismo plato)*
*Formato de 0.5 kg solo en pedidos de menos de 15 kg del mismo plato. Si quieres formato de 0.5kg, anótalo en comentarios de producto a la hora de tramitar el pedido.
Con el plato individual de Pollo y Cerdo tu perro se beneficiará de los nutrientes de ambas proteínas:
La carne de cerdo es fuente de Omega-3, que mantiene la piel elástica y el pelo brillante además de prevenir problemas articulares y cardiovasculares. Es fuente de minerales como hierro, zinc, fósforo, magnesio y potasio. También lo es de aminoácidos esenciales y condroprotectores como el colágeno que ayudan a reforzar el sistema musculoesquelético
Gracias a su contenido en ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados ayuda a mantener a raya el colesterol.
El pollo es una carne baja en calorías y grasas que además aporta aminoácidos esenciales
Refuerza la salud muscular y el sistema inmunitario gracias al hierro, magnesio, fósforo, potasio y zinc.
Es fuente de triptófano, que es un aminoácido esencial (es necesario ingerirlo a través de la alimentación) a partir del cual se sintetiza melatonina y serotonina que son moléculas implicadas en el correcto funcionamiento cognitivo, descanso y regulación del estado anímico. Esenciales para regular el sueño-vigilia.
Ayuda a reforzar el sistema inmunitario gracias a la vitamina B2.
La carne de pollo es fuente de selenio que es un micronutriente esencial para el buen funcionamiento del sistema inmunitario.
El hígado es fuente de hierro que podría ayudar a aliviar la fatiga y a prevenir la anemia. Es fuente de otros minerales como el cromo, que juega un papel importante en el metabolismo de las grasas y los carbohidratos.
La calabaza es fuente de fibra soluble que ayuda a regular el proceso digestivo. También lo es de potasio entre otros nutrientes. La judía verde es fuente de fibra soluble; también lo es de silicio, que se ha correlacionado con ayudar a conseguir una mejor densidad ósea. Además de presentar un bajo contenido en sodio, que ayuda a prevenir la hipertensión. La zanahoria es fuente de fibra que podría ayudar a saciar el hambre, y con ello ayudar a prevenir la obesidad. También es fuente de fósforo y magnesio. El brócoli es un alimento antioxidante que también es fuente de fibra y magnesio. El calabacín proporciona 3 minerales esenciales para el buen estado de los huesos: calcio, fósforo y magnesio. Todas las verduras están cocinadas al vapor.
Información nutricional: Humedad: 69.2%, Proteína bruta: 14.2%, Grasas: 8.7%, Carbohidratos: 2.4%, Cenizas totales (minerales): 2.54%, Fibra alimentaria total: 0.9%, Energía metabolizante: 145 Kcal/100gr.
Ha algunos que les sienta fenomenal de buenas a primeras, a otros les cuesta un poquito más, pero generalmente con 3 días su sistema digestivo ya se habrá adaptado.
Durante una semana se da una ración la mañana comida cocinada y por la noche su comida habitual (pienso, deshidratada, latitas,...). Al terminar la semana ya podemos darle sólo comida cocinada mañana y noche.
¡Sobre todo no mezclar la comida cocinada en el mismo plato que el pienso!
Si durante los días de transición hace cacas blandas los primeros días, no te preocupes, es totalmente normal. ¿Qué te pasaría a ti si durante toda tu vida hubieras comido galletas y de golpe te comes un bistec con ensalada?, pues que tu estómago no estaría preparado y tardaría unos días en adaptarse.
Si te preocupan las cacas blandas hierves un trocito de calabaza (sin aceite y sin sal) se lo chafas y listos, ¡cacas blandas fuera!! En cambio, si las cacas son muy duras o ves que están estreñidos, lo que podemos hacer es hervir acelgas o espinacas (u otras verduras de hoja verde), sin aceite ni sal, lo chafamos y se lo añades al plato, el tema de las cacas debería mejorar.
El producto congelado es práctico para almacenar y garantiza una conservación de todos los nutrientes para una rápida consumición después de su descongelación.
Lo primero que debes hacer es descongelar el producto de una manera lenta y uniforme en el refrigerador. Este método te tomará mucho más tiempo, pero también es el más seguro y sencillo.
También puedes descongelar carne en un tazón de agua fría. Será más rápido que el método anterior y también más suave que el microondas.
Por último, si quieres descongelar con rapidez, utiliza la función de Defrost de tu microondas.
Refrigerador
Utiliza el refrigerador para descongelar el producto de manera lenta y uniforme.
¡Importante: aplicar método 24 horas antes de consumirlo!
La ventaja de utilizar este método para descongelar es la facilidad. Si no puedes esperar por lo menos unas 24 horas, opta por un método más rápido.
Utiliza agua fría para descongelar el producto de una a tres horas
Utiliza el microondas para descongelar el producto rápidamente
La ventaja de utilizar este método para descongelar es que es la forma más rápida de hacerlo. La desventaja es que los bordes del producto se pueden descongelar mientras que el resto se mantiene congelado.