La piel de tu amiguito empieza a notarse más nutrida.
Notarás a tu pequeño con más energía y vitalidad.
Su peso será más estable, puesto que no comerá nada que no deba comer.
Su dentadura estará más sana ya que no quedarán restos de harina en las encías (como sucede con la comida seca). Aparece menos sarro y disminuye el mal aliento.
Gracias a los nutrientes naturales que lleva la comida no procesada, su organismo disfrutará de condroprotectores naturales que ayudan a reforzar sus articulaciones.
Ayuda a la digestión. Gracias a esto sus deposiciones serán mucho más saludables y con menos hedor.
Se producirá una menor ingesta de agua ya que no tienen que beber grandes cantidades porque los productos naturales ya lo llevan.
Ayuda a mejorar su salud muscular, ocular, ósea y cardiovascular.
Ayuda a reforzar el sistema inmunitario.
Los nutrientes de la comida producen un efecto Anti-Aging.
Debido a los componentes naturales, ayuda a refuerzar los huesos.