Cuándo puede salir un cachorro a la calle

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Las primeras salidas del cachorro marcan un antes y un después en su desarrollo físico, emocional y social. Aunque muchos tutores tienen dudas sobre el mejor momento para empezar a sacar a su perro a la calle, la clave está en encontrar el equilibrio entre proteger su salud con las vacunas y aprovechar el período crítico de socialización, que ocurre entre las 8 y las 16 semanas de vida.

Las primeras experiencias fuera de casa son cruciales para la socialización y el aprendizaje. Exponer a un cachorro a diferentes entornos, personas y sonidos le permite desarrollar habilidades sociales que serán fundamentales para su vida adulta. Durante este periodo, los cachorros aprenden a gestionar nuevos estímulos y a adaptarse a situaciones diversas, lo que les ayuda a convertirse en perros equilibrados y seguros.

Sin embargo, aunque salir al exterior ofrece muchos beneficios, también implica ciertos riesgos, especialmente si el cachorro aún no ha completado su serie de vacunas. La exposición a virus y bacterias en espacios públicos puede ser peligrosa para un cachorro con un sistema inmunológico aún en desarrollo. Por eso, es crucial tomar precauciones y seguir las recomendaciones veterinarias para asegurar que este proceso sea seguro y beneficioso.

En este artículo te explicamos todo lo que necesitas saber para que las primeras salidas de tu cachorro sean positivas y seguras: desde las recomendaciones veterinarias, el protocolo de vacunación, los riesgos de salir sin inmunización completa, hasta consejos prácticos sobre cómo socializar y preparar a tu cachorro para el paseo.

Recomendaciones veterinarias clave: Protocolo para cachorros

Seguir con el protocolo veterinario para cachorros es esencial para garantizar que tu perro esté protegido mientras comienza a explorar el mundo exterior. A continuación, te explicamos las pautas más importantes que debes seguir para asegurar una correcta inmunización para que podáis disfrutar de tus primeros paseos de forma segura.

Además de seguir el protocolo vacunal, otro aspecto fundamental para el desarrollo del cachorro es la alimentación. La comida natural puede y debe introducirse desde el inicio del destete, siempre adaptada a sus necesidades nutricionales y etapa vital. Apostar por una dieta natural desde cachorro no solo fortalece su sistema inmunológico, sino que también favorece su crecimiento, salud digestiva y bienestar general. Si quieres saber cómo comenzar, te dejamos esta guía completa sobre el destete de cachorros con dieta natural, donde explicamos paso a paso cómo hacerlo de forma segura y saludable.

Desarrollo del sistema inmunológico en cachorros

Durante sus primeras semanas de vida, los cachorros reciben la inmunidad a través de la leche materna, lo que les ofrece protección por un tiempo limitado, pero va disminuyendo gradualmente.

La inmunidad propia de los cachorros comienza a desarrollarse alrededor de las 8 semanas, cuando su sistema inmunológico empieza a ser capaz de generar sus propios anticuerpos y protegerse por sí mismos.

Calendario de vacunación del cachorro

Seguir con el calendario de vacunación es fundamental para proteger la salud de tu cachorro durante sus primeros meses de vida. Las vacunas ayudan a preparar su sistema inmunitario y prevenir enfermedades graves y contagiosas que podrían poner en riesgo su vida. Las pautas más habituales para la vacunación son:

  • Primera vacuna (6-8 semanas): Parvovirus y moquillo. Su aplicación coincide con el descenso de anticuerpos maternales.
  • Segunda vacuna (entre 3 y 4 semanas después, 9-12 semanas): Se trata de un refuerzo de la primera vacuna y normalmente se añade la hepatitis, la leptospirosis y hasta la parainfluenza. Se le llama vacuna polivalente.
  • Tercera vacuna (entre 3 y 4 semanas después, 12-16 semanas): se administra la segunda dosis de la vacuna polivalente.

Es muy importante esperar al menos 7 días después de la última dosis antes de sacar al cachorro a la calle. Este tiempo permite que su sistema inmunológico genere los anticuerpos necesarios para protegerlo adecuadamente.

Vacuna contra la rabia: esta vacuna es obligatoria en algunas comunidades autónomas y, además, es imprescindible para viajar al extranjero con tu perro. Se puede administrar a partir de los 3 meses, aunque muchos veterinarios prefieren esperar un poco más para que el cachorro esté más desarrollado, lo que reduce cualquier posible efecto adverso.

¿Qué hacemos si hay algún retraso en la vacunación?

Si por alguna razón no has podido seguir el calendario de vacunación de manera estricta, lo mejor es consultar con tu veterinario para ajustar el plan de vacunación. Aunque el cachorro no estará completamente protegido hasta que reciba todas las dosis, se pueden tomar precauciones adicionales, como mantenerlo alejado de otros perros desconocidos y de espacios públicos hasta que complete la pauta vacunal.

Peligros de salir sin vacunar. Principales enfermedades

Sacar a tu cachorro al exterior antes de completar su vacunación puede exponerlo a serios riesgos para su salud. Su sistema inmunológico está aún en desarrollo y son más sensibles a contagiarse de enfermedades graves que pueden encontrarse en espacios públicos. Las siguientes enfermedades son algunas de las más comunes y peligrosas para un cachorro:

  • Parvovirus: enfermedad extremadamente contagiosa que afecta sobre todo al tracto intestinal, causando diarrea sanguinolenta, vómitos y deshidratación.
  • Moquillo: enfermedad viral que afecta al sistema respiratorio, digestivo y nervioso. Los síntomas incluyen secreciones nasales, tos, fiebre y, en casos graves, convulsiones o daños neurológicos.
  • Leptospirosis: enfermedad bacteriana que puede ser transmitida por la orina de animales infectados, sobre todo en zonas con agua estancada. Causa fiebre, ictericia y daño hepático. Es una zoonosis, puede ser transmitida a los seres humanos.
  • Hepatitis canina: enfermedad causada por virus que afecta al hígado, riñones y otros órganos. En sus síntomas podemos incluir fiebre, pérdida de apetito, vómitos y, en casos graves, insuficiencia hepática. Puede ser mortal si no se trata adecuadamente.
  • Parainfluenza o Tos de las Perreras: es una infección respiratoria altamente contagiosa que puede causar tos persistente, fiebre y malestar. Aunque no es tan grave como otras enfermedades, puede llevar a complicaciones y afectar el bienestar del cachorro.
  • Rabia: es una enfermedad viral mortal que afecta al sistema nervioso central. Se transmite por la saliva de animales infectados, normalmente a través de mordeduras. Aunque en España (peninsular e islas) se considera libre de rabia desde 1978, su peligrosidad y capacidad de transmisión a los humanos (zoonosis), marca que su vacunación sea obligatoria en gran parte del territorio y para viajar a otros países.

    Recomendaciones veterinarias para las primeras salidas

    Las primeras salidas del cachorro deben realizarse con precaución para garantizar su seguridad y salud. Aquí te dejamos algunas recomendaciones clave:

    • Evitar el contacto con heces, agua estancada, zonas muy sucias e interacciones con perros no vacunados. El sistema inmunológico del cachorro estará aún inmaduro y es importante prevenir posibles contagios.
    • Buscar zonas seguras y controladas para las salidas. Zonas tranquilas y limpias en entornos naturales alejados de los núcleos urbanos son ideales para evitar el contacto con posibles patógenos. Es importante supervisar las interacciones del cachorro con el entorno para asegurarnos que no se acerca demasiado a alguna zona que pueda ser un foco.
    • Observa cualquier síntoma de malestar después del paseo. Si el cachorro jadea de forma excesiva, tiene temblores, diarrea o vómitos, contacta a tu veterinario.
    • Fomenta la socialización temprana y segura. Expón al cachorro de manera controlada a nuevos estímulos, personas y otros perros vacunados para un desarrollo emocional y social saludable.

    Periodo crítico de socialización y aprendizaje: la visión de educación canina

    El periodo crítico de socialización es uno de los momentos más importantes en el desarrollo de un cachorro, y ocurre entre las 8 y 16 semanas de vida. Durante esta etapa, el cerebro del cachorro está especialmente receptivo a nuevas experiencias, lo que influirá de forma crucial en su comportamiento y su capacidad para interactuar con el mundo durante toda su vida.

    ¿Qué es y por qué es tan importante?

    La socialización temprana es clave para que el cachorro aprenda a relacionarse de forma racional y adecuada con otros perros, personas y nuevos entornos. Si el cachorro tiene experiencias positivas en este periodo, es mucho más probable que crezca siendo un perro equilibrado, confiado y con las habilidades comunicativas y de gestión emocional necesarias para su día a día. Sin embargo, si este proceso no se hace de forma adaptada, progresiva e individualizada, el cachorro podría desarrollar inseguridades o comportamientos problemáticos que pueden ser mucho más difíciles de trabajar con el tiempo.

    Cómo socializar a un cachorro antes de salir a la calle

    Antes de que tu cachorro pueda salir a la calle, puedes comenzar a socializarlo en entornos seguros y controlados. Aquí te dejamos algunas ideas para fomentar una socialización adecuada:

    • Entornos naturales: aunque evitemos llevarlo a la calle, podéis explorar otros lugares naturales, que se vean limpios y controlados. Así el cachorro podrá oler, explorar y acostumbrarse a diferentes superficies.
    • Paseos en brazos: Llevarlo en brazos durante los primeros paseos fuera de casa le ayudará a familiarizarse con los sonidos, los olores y las vistas del exterior, sin exponerse a riesgos de salud. Es mejor empezar con estos paseos en horarios tranquilos para evitar asociaciones negativas a la calle.
    • Exposición controlada a sonidos, olores y personas: Aprovecha las oportunidades para exponer de forma gradual al cachorro a nuevos estímulos dentro de casa. Puedes presentarle diferentes sonidos (como el timbre de la puerta o música suave) y hacer que conozca a personas de confianza que lo traten con suavidad y calma.
    • Socializar en casa perros adultos vacunados y equilibrados: Si tienes amigos con perros adultos y con habilidades sociales, invítalos a tu hogar para que tu cachorro pueda interactuar con ellos en un ambiente seguro y controlado. Esto le ayudará a aprender el lenguaje canino y socializar de forma progresiva y adaptada a sus tiempos y necesidades.

    Preparación al paseo

    Para que toda la experiencia sea positiva y segura, es importante entrenar una preparación previa con nuestro cachorro antes de que llegue el momento de salir a la calle. Te dejamos algunos consejos prácticos para los primeros paseos.

    1 Cómo presentar la correa y el arnés:

    Antes de salir, asegúrate de que tu cachorro se sienta cómodo con la correa y el arnés. Deja que los explore primero en casa, que los huela y se familiarice con ellos. Es mejor no correr en estos procesos, es importante que haga una asociación positiva con la correa y el arnés. Premialo con un poco de comida y felicitaciones cada vez que se ponga el arnés.

    2 Primeros paseos. Duración y frecuencia:

    Al principio, los paseos deben ser cortos y tranquilos. Comienza con paseos de unos 10-15 minutos, de 2 a 3 veces al día, así evitarás que el cachorro se agote o se sienta sobrepasado. Con el tiempo, y a medida que se acostumbre a caminar, puedes aumentar poco a poco la duración y la distancia del paseo.

    3 Cómo gestionar el miedo y la sobreexcitación:

    Es completamente normal que tu cachorro se sienta un poco nervioso o excitado durante los primeros paseos. Si ves que se asusta o se siente agobiado, no lo obligues a seguir caminando. Haz una pausa, tranquilizarlo con voz suave y dale tiempo para que se relaje. También es importante evitar que se sobreexcite, ya que esto puede generar comportamientos indeseados cuándo vaya creciendo (sobre todo en la adolescencia). Si el cachorro se muestra muy inquieto, lo mejor es continuar el paseo en una zona más tranquila para terminar el paseo de forma relajada y positiva.

    Errores comunes

    Es importante tener en cuenta ciertos errores, que son bastante comunes al socializar a tu cachorro, para garantizar una experiencia positiva y segura:

    • Forzar interacciones: Aunque es importante que tu cachorro socialice, no debes obligarlo a interactuar con otros perros o personas si no está cómodo o preparado. Forzar estas situaciones puede generar miedo, estrés o ansiedad, lo que además de dificultar su adaptación, podría provocarle problemas de gestión emocional además de dificultades en su capacidad de comunicación. Lo mejor es dejar que se acerque a los demás de manera voluntaria y a su propio ritmo.
    • Exponerlo a ambientes demasiado estimulantes o sobreexposición: Evita llevar a tu cachorro a lugares con demasiados estímulos, como parques de perros o zonas muy concurridas, especialmente al principio. Estos entornos pueden ser demasiado intensos para un cachorro que aún está aprendiendo a entender y gestionar nuevos estímulos. Comienza con lugares tranquilos y poco transitados, donde pueda sentirse cómodo y relajado.
    • No respetar su ritmo individual: Cada cachorro tiene su propio ritmo de adaptación y socialización. Algunos pueden sentirse cómodos rápidamente en nuevas situaciones, mientras que otros necesitan más tiempo. Es fundamental que se respete su ritmo individual y no forzarlo a socializar o explorar si no se siente listo.

    Protocolo completo para las primeras salidas del cachorro

    Como hemos remarcado durante el artículo, las primeras salidas de tu cachorro son cruciales para su desarrollo, por lo que es importante seguir un protocolo que combine tanto las recomendaciones veterinarias como los principios de educación canina. De esta manera, se asegura su salud y se facilita su adaptación al entorno exterior. 

    A continuación describiremos las claves y el paso a paso detallado para que estas primeras experiencias sean seguras y positivas para tu cachorro.

    Paso a paso

    1. Qué llevar: 

    • Premios de alto valor: Escoge snacks sabrosos, para reforzar los comportamientos que nos interesen durante el paseo.
    • Agua y un recipiente plegable para asegurar su hidratación durante el paseo.
    • Bolsas higiénicas y agua para limpiar la orina.
    • Arnés ajustable y correa de 2-3 metros mínimo.

    2. Elección del horario y lugar:

    • Horarios tranquilos: a primera hora de la mañana o las última hora de la tarde, cuando hay menos personas y ruidos en la calle.
    • Zona: busca un lugar limpio y sin demasiados estímulos, como una calle tranquila o un parque pequeño, sin mucha afluencia de personas o perros.

    3. Cómo actuar ante otros perros y personas:

    • Presentaciones seguras y controladas: Deja que tu cachorro pueda olfatear a otros perros o personas durante 3-5 segundos y sin tensión en la correa. Ayúdale a retirarse de la interacción si muestra señales de incomodidad, como rigidez o posturas tensas.
    • Reconocer señales de incomodidad o miedo: Presta atención al lenguaje corporal del cachorro. Si está rígido, aparta la mirada, bosteza con frecuencia, se relame el hocico o tiene el pelo erizado, puede necesitar un poco de tiempo y espacio. Lo mejor es cortar la interacción e intentarlo de nuevo en otro momento.
    • Utiliza la técnica de "jackpot" para premiar los comportamientos más deseados. Por ejemplo, si tu cachorro ignora un estímulo negativo (como otro perro ladrando a lo lejos), o si empieza a hacer las conductas higiénicas fuera de casa.

    4. Qué evitar durante los primeros paseos

    • Contactos peligrosos: evitaremos el contacto con charcos de agua, basura, heces, orines o perros desconocidos, ya que pueden ser focos de infecciones o enfermedades.
    • Situaciones estresantes: evitaremos que el cachorro se exponga a situaciones excesivamente estimulantes. Mejor esquivar grandes multitudes, ruidos fuertes o parques muy transitados en sus primeras salidas.
    • Peligros físicos: evita zonas del suelo sucias por si pudiera haber objetos peligrosos, como cristales o clavos. Los cachorros descubren el mundo con la boca y podrïan hacerse daño
    • Evita el uso de collares y correas retráctiles. Los collares ejercen presión sobre el cuello del cachorro y pueden causarle molestias o incluso lesiones, sobre todo si tira durante el paseo y las segundas pueden dificultar el manejo del paseo y aumentar el riesgo de accidentes.
    • No permitas que extraños acaricien a tu cachorro sin pedir permiso. Esto puede generar inseguridad en el perro, especialmente si aún está en su fase de socialización.

    5. Tras el paseo

    • Después de cada paseo, realiza una revisión básica. Inspecciona sus almohadillas orejas y ojos por si hubiera heridas o irritaciones.

    Mantén la calma y la paciencia. Cada cachorro tiene su propio ritmo, y es importante que no apresures los paseos ni las experiencias. Si bien es fundamental socializarlo y adaptarlo al mundo exterior, también es esencial respetar sus tiempos y no forzarle a situaciones que le generen estrés o incomodidad.

    Conclusión

    Las primeras salidas no solo son una aventura para tu cachorro, y toda la familia, también marcan una etapa decisiva en su desarrollo. Siguiendo un protocolo que combine la salud y la educación, estarás estableciendo las bases para que tu cachorro crezca equilibrado, disfrute de sus paseos con confianza y aprenda a relacionarse de forma positiva con el entorno. La clave está en acompañarlo con calma, sin prisas ni presiones, y permitiéndole descubrir el mundo a su ritmo. Cada experiencia cuenta y, bien gestionada, ayudará a construir un perro seguro, confiado y feliz.

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