Glándulas Anales en Perros
Es posible que hayas escuchado algo sobre las glándulas anales o los también llamados sacos anales de los perros. También es posible que no tengas ni idea de lo que son. Sin embargo, seguro que habrás visto a un perro arrastrar su trasero por el suelo; el motivo de este comportamiento, muy probablemente, se deba a problemas con las glándulas anales del perro.
¿Qué son las glándulas anales en perros y cuál es su función?
Los sacos anales son unas formaciones, como dice su nombre, son glándulas ubicadas en los laterales del ano de cada perro. Su función es producir y secretar una sustancia que lubrica el ano, ayudando durante la salida de las heces. Otra de sus funciones es producir un fuerte olor que marca las heces y permite identificar las heces de cada perro.
Ubicación de las glándulas anales: ¿dónde se encuentran?
Encontramos dos glándulas, una en cada lateral del ano, con un cierto desplazamiento hacia la zona ventral. Si nos imaginamos el ano como un reloj, encontraríamos estas glándulas entre las 4-5 y las 7-8 horas.
Si llegamos a oler el contenido de estas glándulas, notaremos que produce un olor extremadamente fuerte; es un olor desagradable, similar al de pescado podrido.
Cómo funcionan las glándulas anales de los perros.
Cuando el perro defeca y las heces pasan por el tramo final del recto llegando al ano, estas heces dilatan el tejido anal, haciendo que las glándulas se vacíen y liberen su contenido en el mismo ano, recubriendo las heces. ¡Qué escatológico suena! Pero es así como los perros lubrican y “perfuman” sus heces para que sean reconocibles y olfateables por otros canes. Es como un perfume único que los caracteriza y, por esto, ellos se saludan olfateándose el trasero.
En algunos casos, los perros, cuando están muy asustados, pueden llegar a vaciar las glándulas anales de golpe, dejando un olor muy fuerte y característico
Según cada perro, su genética, dieta, edad,... tendrá una conformación un poco diferente de estas glándulas y también producirá una secreción diferente.
La secreción de las glándulas anales o sacos anales puede variar en color, des del marrón o negro oscuro hasta al color blanquecino o amarillento; y puede variar en consistencia, des de ser prácticamente sólida hasta líquida pasando por la consistencia pastosa.
¿Cuándo y cómo vaciar las glándulas anales de un perro?
De bien seguro que habrás escuchado que hay personas que vacían los sacos anales de sus perros o quizás se lo hacen a tu perrito cuando lo llevas a la peluquería. Pero nada más lejos de la realidad: es un mito que hay que vaciar manualmente las glándulas anales de tu perro cada X tiempo.
¿Es necesario vaciar las glándulas anales de forma manual?
De forma natural, todos los perros deberían vaciar el contenido de las glándulas anales cuando defecan. Por eso, no es necesario que nosotros las vaciemos. Pero, debido a la alimentación, enfermedades y a la selección genética, hay perros que tienen una conformación de sus glándulas más profunda y les cuesta más vaciarlas.
Esta dificultad en el vaciado natural de las glándulas, suele ocurrir con perros de tamaño pequeño, por ejemplo, en razas como el Yorkshire Terrier, el Chihuahua, el Bichón Maltés, el caniche toy…, razas braquicéfalas como el Bulldog francés, y en perros sénior. Si nuestro perro tiene tendencia a no vaciar de forma natural sus glándulas, entonces sí que deberemos ayudarlo y vaciarlas manualmente. Lo ideal será revisarlas cada vez que bañemos a nuestro peludo y también si vemos que arrastra el trasero por el suelo (“hace el trineo”) o intenta morderse la zona perianal.
Para facilitar el vaciado natural de sus glándulas, será importante que haga heces sólidas y duras. Esto lo conseguiremos dando una buena alimentación: una dieta natural, como la de Guau&Cat, a base de ingredientes como carnes, pescados y con el contenido correcto de fibra vegetal, ayudará a hacer las heces con dureza para que puedan ir vaciando las glándulas anales al defecar.
Pasos para vaciar las glándulas anales de tu perro en casa
Para drenar los sacos anales de un perro, primero deberemos colocarnos siempre en una zona que sea fácil de limpiar, por ejemplo, la ducha, la bañera, el patio,... Será importante que alguien sujete la cabeza del perro o lleve un bozal si no está acostumbrado a este procedimiento, para evitar que nos muerda.
A continuación, deberemos colocarnos guantes o ayudarnos con un papel, nos colocaremos frente el ano del perro y elevaremos su cola. Seguidamente, colocaremos nuestro dedo índice y pulgar en forma de pinza y presionando la zona perianal de proyección de las glándulas anales (recuerda que las encontramos en las 4-5 y en las 7-8 si el ano fuera un reloj). Antes de presionar nuestros dedos, aparta tu cara o coloca un papel delante para que el contenido no salga disparado y manche ¡Seguro que no quieres mancharte con la secreción de las glándulas anales!
Después de terminar el vaciado, es recomendable limpiar la zona anal para retirar el contenido que haya podido quedarse enganchado.
¿Cuándo acudir al veterinario para el vaciado interno?
En algunos perros concretos, es posible que sea más complicado vaciar las glándulas ya que las pueden tener más internas. En estos casos, lo mejor será que tu veterinario lo valore y, si es posible vaciarlas externamente, que te muestre como hacerlo. También es posible que, si están muy internas, haya que vaciarlas desde dentro.
El vaciado interno de las glándulas anales puede realizarlos un veterinario o un auxiliar técnico veterinario a través de una palpación rectal.
¿Cada cuánto deberemos repetir el procedimiento? Esto dependerá de cada perro, pero podemos comprobar externamente si los sacos están llenos y entonces vaciarlos. También nos guiaremos por si el perro muestra molestias anales o frota su trasero con el suelo.
Problemas más comunes en las glándulas anales de los perros
Si tu perro no tiene una dieta adecuada y no vacía sus glándulas anales de forma natural ni manualmente, esto puede desembocar en un problema más grave: fístulas perianales, infección de los sacos anales, inflamación de las glándulas anales,...
Síntomas de problemas en las glándulas anales
Si hay una inflamación de las glándulas anales o una saculitis por el mal vaciado del contenido de los sacos anales, veremos que el perro está incómodo, tiende a morderse la zona del culo, y además arrastra el trasero con frecuencia por el suelo. En estos casos, deberemos actuar y drenar los sacos antes de que se complique.
Al ser una zona cercana al ano, es una zona por la cual pasan muchas bacterias. Si las glándulas están inflamadas, es más fácil que acaben siendo afectadas por las bacterias y se produzca una infección de los sacos anales. Las infecciones deben ser tratadas por un veterinario.
Enfermedades frecuentes: inflamación, infección y fístulas
Cuando el contenido llega a ser muy elevado, no se vacían, y hay una infección, puede acabar en una fístula de la zona. Las fístulas son trayectos anómalos que se forman a través de los tejidos. Se puede formar una fístula que vaya del saco anal hasta la piel del lateral del ano. En estos casos veremos que la piel perianal supura y va drenando pus de esa zona. Tendremos que visitar al veterinario para que pueda instaurar un tratamiento y realizar todas las curas necesarias de la zona para solucionar el problema.
Hay razas como los pastores alemanes que están predispuestas a tener fístulas en la zona perianal y, puede ser debido a un problema inmunomediado.
Los tumores también pueden aparecer en las glándulas anales. Son tumores poco frecuentes pero debemos conocerlos para saber si hay que llevar a nuestro perro al veterinario. Suelen ser adenocarcinomas de las glándulas apocrinas. Este tipo de tumores son muy agresivos y requieren un tratamiento rápido para asegurar calidad de vida al perro. Aparecen tanto en hembras como en machos, y también en perros de cualquier raza. Aun así, son más frecuentes en perros de razas Spaniel y en perros en edad sénior.
¿Cuáles son los signos de los tumores de las glándulas anales en el perro?
Lo más visible será un abultamiento de la zona perineal donde está el saco anal afectado. También podemos ver estreñimiento, dolor o dificultad al defecar, sangre en las heces,...
Razas más propensas a problemas anales
Algunas razas de perros tienen una mayor predisposición a desarrollar problemas en las glándulas anales debido a su tamaño, anatomía o factores genéticos. Identificar si tu perro pertenece a alguna de estas razas puede ayudarte a tomar medidas preventivas y garantizar su bienestar.
Razas pequeñas
- Yorkshire Terrier: Su tamaño compacto y la conformación más profunda de sus glándulas dificultan el vaciado natural, lo que aumenta el riesgo de obstrucción.
- Chihuahua: Este tipo de raza suele tener heces más blandas si no se alimenta adecuadamente, lo que dificulta el vaciado de las glándulas.
- Bichón Maltés: Sus glándulas suelen ser más pequeñas y propensas a acumular secreciones, lo que puede derivar en inflamación o infección.
- Caniche Toy (Poodle Toy): Similar a otras razas pequeñas, esta raza puede requerir ayuda manual o revisiones periódicas para evitar complicaciones.
Razas braquicéfalas
- Bulldog Francés: La anatomía única de esta raza debida a la selección, puede hacer que las glándulas anales no se vacíen adecuadamente, lo que las predispone a infecciones.
- Pug (Carlino): Suelen tener problemas relacionados con la dieta y, debido a su estructura anatómica, afecta el funcionamiento normal de las glándulas.
Razas medianas y grandes
- Pastor Alemán: Esta raza tiene una mayor predisposición genética a desarrollar fístulas perianales que causarán problemas en las glándulas anales. Estas fístulas pueden estar relacionadas con problemas inmunomediados y, se ha visto que con dietas hipoalergénicas o dietas naturales con proteínas noveles junto con medicación pueden mejorar.
- Cocker Spaniel: Tiende a sufrir inflamaciones en las glándulas anales, que pueden derivar en infecciones si no se tratan a tiempo.
- Beagle: Aunque es una raza robusta y los problemas de salud no son frecuentes en ellos, puede presentar problemas si no realiza suficiente ejercicio o si tiene una dieta inadecuada.
Factores adicionales que aumentan el riesgo
Además de las razas mencionadas, otros factores pueden influir en la salud de las glándulas anales:
- Edad avanzada: Los perros séniores tienen más dificultades para vaciar naturalmente sus glándulas ya que la musculatura de la zona se debilita y suelen realizar menos ejercicio.
- Sobrepeso: La acumulación de grasa en la zona perianal puede interferir con el vaciado normal. Además, suele ir ligado al sedentarismo.
- Dieta inadecuada: Una alimentación baja en fibra o ultraprocesada puede provocar heces blandas, dificultando el proceso natural de vaciado.
Conocer las necesidades específicas de tu perro según su raza es clave para prevenir problemas en las glándulas anales y mejorar su calidad de vida.
Consejos para prevenir problemas en las glándulas anales.
Evitar la saculitis anal en los perros es fundamental para garantizar su bienestar y prevenir molestias o problemas más graves relacionados con las glándulas anales. Para ello, es esencial adoptar hábitos que favorezcan el vaciado natural de estas glándulas, a continuación os explicamos algunos.
¿Cómo influye la alimentación en la salud anal de tu perro?
Ofrece una dieta natural variada y rica en fibra: las heces firmes y duras ayudan a vaciar los sacos anales .
Lo ideal será que tu perro realice heces compactas que presionen las glándulas anales al salir y, que por ende, las vacíe de forma natural.
Beneficios de una dieta natural o BARF para evitar problemas anales
Las dietas naturales cocinadas o BARF contienen los ingredientes necesarios para que las heces de los canes sean pequeñas, compactas, poco olorosas y duras, facilitando así el vaciado natural de los sacos anales
En caso de que tu perro necesite un extra de fibra, siempre puedes añadirle espinacas, acelgas, calabaza, zanahoria,... a su dieta. Recuerda siempre cocerlo a fuego lento sin aceite ni sal y triturarlo para una mejor digestión.
Ejercicio y otros hábitos saludables
- Mantén a tu peludo activo: el ejercicio ayudará al peristaltismo del sistema digestivo y al vaciado natural de las glándulas anales
- Limpia y revisa la zona perianal. Puedes hacerlo periódicamente para revisar que no tenga ningún problema. Aprovecha para limpiar la zona con toallitas húmedas para perros e hidrata el ano, si fuera necesario.
- Si tu peludo tiene dificultad en el vaciado natural, realiza vaciado manual de las glándulas cada 2-4 semanas, según sea necesario
- Realiza revisiones periódicas con tu veterinario para comprobar que todo funciona perfectamente
¿Sabías que para ellos es como su DNI? No hay dos perros que huelen igual por ahí.
Preguntas frecuentes sobre las glándulas anales en perros
1. ¿Cómo saber si mi perro tiene problemas en las glándulas anales?
Si tu perro arrastra su trasero por el suelo, lame o muerde la zona perianal con frecuencia, presenta un olor desagradable o muestra molestias al sentarse, es posible que tenga problemas con las glándulas anales. En estos casos, es recomendable acudir al veterinario.
2. ¿Es peligroso vaciar las glándulas anales manualmente en casa?
El vaciado manual de las glándulas puede ser seguro si se realiza correctamente. Sin embargo, hacerlo de forma inadecuada puede causar irritación, daño o infección. Si no estás seguro, consulta con un veterinario para que te enseñe cómo hacerlo de forma segura.
3. ¿Qué ocurre si no se vacían las glándulas anales de un perro?
Cuando las glándulas anales no se vacían correctamente, pueden inflamarse, infectarse e incluso desarrollar abscesos o fístulas. Esto puede causar dolor y requerir atención veterinaria urgente.
4. ¿Todas las razas de perros tienen problemas en las glándulas anales?
Aunque cualquier perro puede tener problemas, las razas pequeñas, como el Yorkshire Terrier o el Chihuahua, y las braquicéfalas, como el Bulldog Francés, son más propensas debido a la conformación de sus glándulas.
5. ¿Qué relación tiene la dieta con los problemas en las glándulas anales?
Una dieta inadecuada puede causar heces blandas, lo que dificulta el vaciado natural de las glándulas. Una alimentación natural, como la dieta BARF, rica en proteínas y fibra, ayuda a producir heces firmes que favorecen el vaciado correcto.
6. ¿Cómo puedo prevenir problemas en las glándulas anales de mi perro?
Proporcionando una dieta natural equilibrada y rica en fibra, asegurándote de que tu perro haga ejercicio regularmente, de que sus heces sean firmes y duras, y manteniendo una buena higiene de la zona perianal. También es importante acudir al veterinario si observas signos de molestia.
7. ¿Es necesario vaciar las glándulas anales periódicamente aunque mi perro no tenga problemas?
No, si tu perro no muestra signos de incomodidad y vacía sus glándulas de forma natural, no es necesario intervenir. El vaciado manual solo debe realizarse cuando haya una necesidad evidente.
8. ¿Qué puedo hacer si las glándulas anales de mi perro huelen muy mal?
Un olor fuerte es normal cuando las glándulas anales se vacían, pero si el olor es constante o muy desagradable, puede ser signo de infección o inflamación. En este caso, consulta a tu veterinario para evaluar la situación.
9. ¿Qué hacer si las glándulas de mi perro están inflamadas o infectadas?
La inflamación o infección de las glándulas anales requiere tratamiento veterinario. Puede ser necesario vaciar las glándulas, administrar antibióticos o incluso realizar procedimientos quirúrgicos en casos graves.
10. ¿Cuándo debo llevar a mi perro al veterinario por problemas en las glándulas anales?
Debes llevarlo al veterinario si presenta dolor al defecar, sangre en las heces, bultos en la zona anal, drenaje de pus o cualquier otro signo de incomodidad en la zona perianal.
Cuida la salud de tu perro y evita problemas en sus glándulas anales con una dieta adecuada y revisiones regulares. Si observas síntomas de incomodidad o necesitas ayuda profesional, no dudes en consultar a tu veterinario.
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¿Tu perro ha tenido problemas en las glándulas anales? Comparte tu experiencia o tus dudas en los comentarios y hablemos sobre el tema.
