¿Cómo se comunica mi perro?

Publicado por Team GUAU&CAT en

como se comunica mi perro

Señales de apaciguamiento

Cuando hablamos de perros, seguro que muchas veces se nos viene la imagen de los perros de la calle. Saludándose, jugando, corriendo con su humano favorito, haciendo sus necesidades, descansando en la terraza de un bar… ¡Y miles de situaciones más!

Las señales de las que os vamos a hablar hoy, son aquellas con las que los perros se relacionan, aquellas con las que se expresan. Son posturas corporales, una comunicación visual para que otros perros puedan entenderse, y si nosotros las aprendemos… ¡También los entenderemos! Estas son conocidas como señales de apaciguamiento.

¿Qué tipo de expresiones nos dan?

Estas señales sirven para algo más profundo que para comunicarse. También sirven para disminuir el estrés, evitar conflictos y agresiones. Las posturas corporales son muy importantes porque son las que reflejan estas señales para que otros las entiendan.

Algunas de estas señales se pueden confundir con aquellas que se utilizan cuando se sienten inseguros, con lo cual dejan de ser señales de apaciguamiento o sociabilizar, sino que son señales de sumisión.

Muchas son sutiles, tanto que pueden pasar desapercibidas para nosotros, pero no entre ellos. Y por ello, cobra más sentido el artículo en el que hablamos de la importancia de que el paseo sea para dedicárselo íntegramente a nuestro perro. Para que nos sea más fácil identificar estas señales y acompañarlo en la comunicación, además de entender cuándo y cómo dejar que se comunique con otros perros, o cuándo no quiere.

Algunas de estas señales pueden ser estirarse, lamerse la nariz, sacudirse, bajar su cola… Y un sin fin de señales que nosotros a veces no entendemos como lo que son. Nos hemos acostumbrado tanto a verlas que nos parecen algo normal y cotidiano.

Gracias a la domesticación, los perros han aprendido a entender nuestras expresiones, faciales, bocales y corporales. Por eso son conscientes y son capaces de comprendernos cuando estamos contentos o enfadados, por ejemplo. Son capaces de percibir esas sensaciones en nosotros.

¿Qué ejemplos de estas señales podemos detectar fácilmente?

Lamerse la nariz es muy típico. Y no hablamos de cuando lo hacen tras comer, beber o cuando están tumbados descansando. Cuando hay un momento tenso, gritos o una agresividad visible por parte de otro perro, uno puede defenderse realizando esta acción. Es una forma muy sutil de dar a entender que no se siente cómodo, para intentar frenar esa agresividad que está sintiendo hacia él.

Puede ocurrir mucho cuando lo regañamos por algo que ha hecho, y no es capaz de entender por qué estamos enfadados. Porque ha pasado un rato y no es capaz de acoplar el enfado con una acción que ya ha pasado.

Todos hemos visto a un perro sonreír. Estirar su comisura hacia los lados y enseñar sus dientes. A muchos nos ha hecho gracia en más de una ocasión, pero en el fondo ese perro nos está avisando de que algo le hace sentir incómodo, igual que en el caso anterior mencionado.

Puede parecer muy divertido, pero debemos entender que no tiene ese tipo de connotación si no ha sido aprendida de ese modo por adiestramiento.

Bostezar es algo muy común cuando estamos cansados o tenemos sueño. Y en el caso de los perros, también bostezan cuando se sienten así. Pero es importante que aprendamos también que esta señal no solo significa esas dos cosas. También son una forma de mostrar su incomodidad hacia una situación molesta. Al igual que lamerse la nariz o sonreír, puede ser por un perro que le ladra sin parar, o porque le estamos regañando. Es otra forma de hacernos saber que no se siente bien ni cómodo con lo que está percibiendo.

Cuidado cuando vemos que nuestro perro eriza el pelo de su lomo. Esta señal es una muestra de grandeza. Cuando la observamos, el perro está intentando mostrarse más grande y mejor que aquel que intenta comunicarse o acercarse a él porque se siente intimidado. Si no lo acompañamos hacia otro lugar ayudándolo a prestar atención a otras cosas, y el otro perro se acerca, existe la opción de que se calme porque ve que no es una amenaza, pero también puede sentir que se invade su espacio y eso puede suponer un enfrentamiento negativo.

Olisquear, dar un rodeo o apartar la mirada. Estas tres señales, mientras van observando al perro al que se van acercando, suele ser una señal para mostrar su inocencia (para entendernos). Es una forma de mostrarse amigable, para que el otro perro no se sienta intimidado ni atacado con la presencia de nuestro perro.

Estas señales son importantes, porque pueden enseñarnos si nuestro perro quiere realmente conocer o acercarse a otros perros o no. Y en otros perros que las hacen, podemos entenderlo de esta forma también. Cuando nos acercamos a un perro en línea recta, este puede sentirse intimidado y por ello acabar reaccionando con ladridos. Por eso es importante ayudar a nuestro perro a que realice estas acciones, ayudando a rodear, por ejemplo a otros cuando se quiere hacer una presentación.

señales de apaciguamiento

¿Te preocupa el bienestar de tu mascota? Visita nuestra tienda online y pásate a los beneficios de la comida natural cocinada.

Educación y re-dirección de comportamientos negativos.

Estas dos acciones son muy importantes en la vida de nuestros perros. Educarlos de forma positiva para que aprendan a relacionarse con otros perros, y también para ayudarnos a nosotros a entender cómo ayudarlos a relacionarse. Por ello es tan importante el Imprinting. Esto es la época de aprendizaje temprano, hasta sus tres meses aproximadamente, en el que deben estar en contacto con sus hermanos u otros perros para aprender a comunicarse y aprender este tipo de señales.

Muchas veces entramos a un perro a nuestras vidas que tienen una edad muy temprana, y a veces sin posibilidad de contactar con otros perros en el hogar. Esto hace que cuando empiezan a relacionarse con perros pasados los tres meses, les cueste más aprender las señales, y en algunos casos no aprenden. No es algo peligroso, pero es cierto que eso les impide conectar con otros perros con la normalidad con la que deberían hacerlo.

Cuando tenemos perros que reaccionan negativamente a las señales de apaciguamiento de otros perros, debemos ser conscientes de que nuestro perro necesita ayuda. Pues la agresividad acaba siendo algo que nos puede afectar negativamente a nosotros. El estrés de un perro, puede acabar provocando estrés en nosotros también. Al igual que nuestro nerviosismo puede afectar negativamente a nuestro perro. Así que si crees que tu perro es reactivo o crees que necesitas entenderlo mejor, ¡busca información! Sobre estas señales o con ayuda de un educador canino (diferente a un adiestrador).

Porque seguro que puedes encontrar la forma de entenderlo mejor, ayudarlo, ayudarte, y lograr que tu relación con tu perro sea lo más apasionante que hayas podido creer jamás.

Y no lo olvides, educar es mucho más fácil cuando es de forma positiva. En nuestra página web tienes snacks con los que puedes felicitar sus acciones positivas. Tenemos, por ejemplo, pulmón de ternera, boquerones… ¡Estos son fáciles de partir para poder ofrecerlos como premios!

Categorías: Educación

0 comentarios

Deja una respuesta

Marcador de posición del avatar

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *